La mayoría de nosotros tenemos una voz interior subconsciente que tiene una idea muy clara de qué es el éxito y que nos juzga en relación con esa métrica. Para nuestro entorno, elementos como la fama, el dinero o el reconocimiento profesional son objetivos dignos de perseguir y suficientemente valiosos como para dedicar nuestra vida a perseguirlos.
Ahora bien, antes de empezar a tomar decisiones basadas en ese objetivo de conseguir el «éxito», ¿no creéis que es importante repasar las implicaciones?
¿Por qué queremos ser exitosos?
Como muy bien explican bien Tim y Andrew de Wait But Why en este artículo, muchas de nuestras preferencias actuales no son resultado de un proceso de análisis e introspección propio.
Muchos de los elementos clave que nos empujan a tomar una decisión u otra provienen de factores externos.
En este sentido, delegar decisiones clave de nuestra vida en terceros puede llegar a tener un coste enorme para nosotros.
¿Qué coste tiene perseguir un objetivo con toda tu energía y dedicación solo para descubrir, una vez conseguido, que ese no era tu objetivo y que has estado viviendo una vida diseñada por otros?
El precio del éxito
La inspiración para escribir este artículo es haber visto el documental «Dancer» sobre la vida de Sergei Polunin.
Sergei es uno de los mejores bailarines de ballet de nuestro siglo. Un niño prodigio originario de una ciudad empobrecida de Ucrania, su historia es una historia de sacrificio total en pos de conseguir un objetivo: estar en la elite mundial del ballet para poder reunir a su familia.
Un talento innato para el ballet junto con un entorno totalmente comprometido con convertirlo en una estrella mundial son el trasfondo de una historia triste pero inspiradora.
En el documental podemos ver cómo el propio Sergei pasa de «bailar con su corazón y transportarse directamente en la música» a ser un bailarín que desea «lesionarse para dejar de tener la opción de seguir bailando».
¿Por qué alguien que está en la cima absoluta de la profesión quiere autolesionarse?
Esa es una pregunta que solo él puede responder, aunque en el documental podemos entender mucho mejor el origen de estos pensamientos. Para mí, la raíz de ese deseo radica en tener la sensación de ser un esclavo de una vida que no ha construido él mismo.
Aunque sus padres tenían una buena intención (i.e. alejar a su hijo de una ciudad devastada por la pobreza), la presión y el control sobre los pasos de su hijo acabaron por llevar a Sergei al límite.
No os digo más para dejaros con ganas de ver el documental 📽️
Y aquí un video para apreciar la obra de Sergei:
Implicaciones para tu vida financiera
¿Cuáles son las reflexiones que extraigo yo de este documental?
Interés compuesto
La mayoría de las cosas buenas en la vida (i.e. dinero, relaciones, carrera, etc.) vienen del interés compuesto. El interés compuesto es una de las fuerzas más maravillosas que existen, su efecto es brutal y lo único que necesita es tiempo.
Precisamente por eso, si lo que quieres es conseguir los mejores resultados en los diferentes ámbitos de tu vida, una de las cosas más importantes es jugar a juegos de largo plazo con gente con visión a largo plazo.
¿En qué se traduce esto para tí?
Pues que una de las claves es encontrar el equilibrio entre probar cosas nuevas y comprometerte con un proyecto – cuando el fit es adecuado – y encontrar también un ritmo sostenible para poder desarrollarte en un horizonte de largo plazo.
Definición de éxito
Muchas veces parece que si no creas una empresa y la vendes por €10 millones no eres nadie. El ruido de Twitter, las noticias, el sesgo de supervivencia, etc. son un cóctel de factores que dificulta en gran medida definir de manera reflexiva qué es el éxito para un@ mism@.
Lo más divertido es si preguntas a estas mismas personas con una carrera profesional «exitosa» (i.e. consultoría, banca, etc.) para que querrían esos €10 millones, la respuesta suele ser: estar con la familia, hacer deporte, etc.
Si bien no soy nadie para decirte que hacer o en qué concentrarte, te invito a leer este post para tener una visión un poco más amplia sobre este tema.
Invertir en ti mism@ tiene un retorno extraordinario
Invertir tiempo en conocerse a uno mismo es un elemento fundamental para una vida mejor. Si bien nos pueda parecer una «pérdida» de tiempo el escucharnos y analizar porqué queremos lo que queremos y pensamos lo que pensamos, para mí es un ejercicio esencial y con un retorno extraordinario.
Cada minuto que inviertas en entenderte son días o meses que evitaras persiguiendo cosas que no reflejan tus preferencias internas reales.
Conclusión
Escoger qué camino seguir es una decisión personal intransferible. Es importante evaluar periódicamente si los objetivos que estamos persiguiendo son una decisión consciente o, si por el contrario, solo estamos racionalizado una decisión tomada por factores externos. «Éxito» en el sentido tradicional de la palabra (i.e. reconocimiento externo) no garantiza paz interior. Sacrificarlo todo por una sola faceta de tu vida es una estrategia muy arriesgada que puede llevarte a caminos inciertos. Invertir en entenderte tendrá un retorno muy superior a cualquier cosa que puedas producir.
Deja una respuesta